Digámoslo así: ¡en Eisenach siempre es cuesta arriba!
Sea a nuestro alojamiento, el "Junker Jörg". (¡La comida y el alojamiento fueron de lo mejor!)
Vaya al castillo de Wartburg, de día y por la noche.
En el propio Wartburg también subimos a muchos pisos y torres.
En la Garganta del Dragón - "montaña" a la derecha, "montaña" a la izquierda - ¡y la subida final!
En la Casa de Bach experimentamos las "alturas de la música", en la Casa de Lutero, en el primer piso, tuvimos una lección
como en la época de Lutero.
También se establecieron muchos récords personales en los bolos.
Y en el camino de las copas de los árboles en el Hainich llegamos hasta la cima.
Así que podemos resumir que no sólo experimentamos los contenidos de las asignaturas de historia, geografía,
biología y música de forma interdisciplinar y de primera mano. En este año
tampoco se ha descuidado la forma física.